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(Por si existía alguna duda sobre la calidad de los artistas jóvenes cristianos fundamentalmente católicos, la presentación el pasado fin de semana de Talentos y Unción 2007, en el Teatro Nacional ha venido a despejar cualquier duda.
Teatro E-Fusión dio un salto profesional que marca su historia al servir de eje a un conjunto de artistas del canto, la danza -clásica y moderna, tanto individual como coreografías grupales , la pantomima, el canto (rock pop, merengue, balada y rap- , el teatro negro, el teatro colectivo de corte popular, el teatro individual, el uso del video, de la fotografía, la poesía coreada y los efectos especiales, que incluyeron el “vuelo” de una actriz representando la República Dominicana conjuntamente con la bandera nacional de mayor tamaño que se haya desplegado en el augusto escenario del Teatro Nacional Eduardo Brito.
Todos los recursos
Teatro y Unción representó el más valido trabajo artístico del movimiento católico y para el cual se utilizó profesionalmente todo recurso del arte y la escena: maquillaje, vestuario, diseño de luces, efectos especiales, banda sonora, canciones -usadas tanto grabadas - incluyendo una bellísima del baladista evangélico boricua René González, todo un clásico viviente- como realizadas en vivo, a golpe de piano, o sobre una banda sonora pre-establecida.
La presentación mostró como el mensaje cristiano puede valerse del arte de la más alta excelencia para dejarse sentir.
Se lucieron como solistas: el niño que actuó teatralmente y cantó con gran seguridad y sentimiento; el joven solista del grupo de mimo, -cantante y mimo de gran expresividad- ; Esther Hernández, -quien sorprendió actuando a quienes la conocían sólo por la ternura de su voz- , esto sin entrar en consideración de los cantantes profesionales y conocidos.
Lo mejor de lo mejor:
Entre los segmentos de mayor impecabilidad e impacto estuvieron el Teatro Musical, el Teatro Negro, el que estuvo a cargo de un mimo ataviado de seda blanca con un efecto de dos cabezas que realmente impresionó. y la Canción final. Cada uno de estos grupos podría perfectamente presentar una producción de su arte en el mismo Teatro Nacional. Mención aparte merecen las coreografías masivas, espectaculares, extraordinariamente coordinadas, reforzadas con la fuerza de la música, la sincronía corporal y el vestuario tremendamente bien diseñado. Los momentos en que actúan más de 100 personas al tono de la música, haciendo exactamente lo mismo, viviendo su arte, expresandose con sus cuerpos, son inenarrables.
La parte que hay que mejorar....
Desde luego que es desagradable criticar a los amigos. Pero cuando queremos que las caras del arte cristiano crezcan, entonces existe un mayor compromiso con la verdad: El teatro popular no estuvo a la altura. Creo que debió estructurarse un segmento primero más breve, segundo con mayor nivel en sus parlamentos y tercero con un histrionismo de mejor calidad, sin influencia de las comedias meridianas de la televisión-
Y ciertamente el Teatro (en la guagua de Fenatrano, de Hubieres) se extendió más del tiempo esperado, le faltó elegancia en los textos y algunos de sus chistes fueron realmente burdos, por lo que recomendamos una revisión y el uso de un bisturí estético en la mesa de pre-producción. Hay allí buenos talentos, pero tienen que elevar el nivel. )
Las fotos de esta crónica son de Edward Roswtand/El Nacional/HOY
1 Comentarios
Ah, si me recuerdas.
Soy Jenifer Perez, la que escribe poesia, puedes ver mi blog.\
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