Mucha gente se preguntó si era de lugar un Festival de Jazz en medio de la tragedia.
Si que lo era.
Por una parte, buena parte de los fondos de este evento servirán a los damnificados y la reconstrucción de comunidades y por otra, el arte tiene esa misión de dar vida y ánimo a sus pueblos en momentos de crisis.
Lo vivido con la apertura del VIII Dominicanan Republic Jazz Festival 2008, no tuvo desperdicios. El escenario fue el Gran Teatro del Cibao. Continuará en la Playa Cabarete. Vean mi crónica del espectáculo en la Sala de la Restauración.
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Chucho Valdés y El Prodigio.
Fusionan con nobleza jazz y música típica.
"Ya Terminamos".
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Chucho Valdés y El Prodigio.
Fusionan con nobleza jazz y música típica.
"Ya Terminamos".
Y con esta expresión el legendario músico cubano Chucho Valdés, grande más allá de sus seis pies y 5 pulgadas, más allá de la calidad misma del Irakere de hoy, más allá de la brillante incursión del merengue típico en la música de los músicos, puso fin a una noche en la Sala de la Restauración del Gran Teatro del Cibao. Una jornada de glorias, talentos y notas, que dificilmente será olvidada.
Y al efecto, la apertura del octavo "Dominican Republic Jazz Festival", realizada anoche como nunca antes se había hecho, estableció con claridad que el arte es una de las esferas humanas de mayor universalidad.
Muchas personas se preguntaron, en principio, "?Qué carajo podía hacer un músico típico como El Prodigio, salido de las fiestas de car wash, al lado de maestros de la música académica sobre el eje del jazz?"
Anoche se les dio a quienes eso inquirían una rotunda, contundente y musical respuesta: El Prodigio, es un músico académico de considerables cualidades para estar en cualquier escenario.
Krency García -verdadero nombre del prodigio- abrió la noche, con "Los Algodones" de ñico Lora, en una interpretación com para figurar en el álbum de oro del merengue experimental dominicano de todos los tiempos.
"Periblues", composición fusionada de jazz y pericoripiao, creación de uno de los jóvenes maestros dominicanos más destacado en el área, Rafelito Mirabal, puso fin a una emocionante y sorprendente descarga musical, coronada por estruendosos aplausos. en adelante la fuerza, la personalidad y la experiencia de muchos años, lse pusieron de manifiesto, tanto en las carreras que se inician desde el saxo o la trompeta, como en las carreras consagradas. Una mujer negra enjuta, vivaz, de afro orgullosamente levantado, de voz manejada con el cuidado de las grandes intérpretes del jazz, carismática y portadora orgullosa de la alegría mulata del Caribe, la hermana de Chucho, Mayra Caridad Valdés, entonó al instante con el público cuando cantó, una de las más desgarradoras preguntas del amor entusiasmado, "Cómo fue¨,
Y al efecto, la apertura del octavo "Dominican Republic Jazz Festival", realizada anoche como nunca antes se había hecho, estableció con claridad que el arte es una de las esferas humanas de mayor universalidad.
Muchas personas se preguntaron, en principio, "?Qué carajo podía hacer un músico típico como El Prodigio, salido de las fiestas de car wash, al lado de maestros de la música académica sobre el eje del jazz?"
Anoche se les dio a quienes eso inquirían una rotunda, contundente y musical respuesta: El Prodigio, es un músico académico de considerables cualidades para estar en cualquier escenario.
Krency García -verdadero nombre del prodigio- abrió la noche, con "Los Algodones" de ñico Lora, en una interpretación com para figurar en el álbum de oro del merengue experimental dominicano de todos los tiempos.
"Periblues", composición fusionada de jazz y pericoripiao, creación de uno de los jóvenes maestros dominicanos más destacado en el área, Rafelito Mirabal, puso fin a una emocionante y sorprendente descarga musical, coronada por estruendosos aplausos. en adelante la fuerza, la personalidad y la experiencia de muchos años, lse pusieron de manifiesto, tanto en las carreras que se inician desde el saxo o la trompeta, como en las carreras consagradas. Una mujer negra enjuta, vivaz, de afro orgullosamente levantado, de voz manejada con el cuidado de las grandes intérpretes del jazz, carismática y portadora orgullosa de la alegría mulata del Caribe, la hermana de Chucho, Mayra Caridad Valdés, entonó al instante con el público cuando cantó, una de las más desgarradoras preguntas del amor entusiasmado, "Cómo fue¨,
Al final, los músicos de Irakere y del Prodigio, se unieron para interpretar una extensa, creativa e inolvidable versión de "Ojas Muertas", en la cual el pericoripiao y el jazz, hicieron salones comunes, validaron la fuerza del arte cuando salta con dignidad las ridiculas fronteras nacionales para lograr una expresión artística única, integral, de lo mejor que los pueblos pueden dar mediante el arte. El VIII Dominican Republic Jazz Festival, se inició de la mejor manera. Hoy y mañana, seguirá en la Playa de Cabarete.
Las presentaciones son gratuitas.".
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