¿No son 500 mujeres asesinadas es un precio muy alto?

Las mujeres han incrementado su presencia en la vida pública, pero no es suficiente. Jenny Lovera y Marivel Contreras, dirigentes de Acroarte. Foto: joserafael sosa.com

En lo que va de año, 8 mujeres han sido asesinadas por la violencia de los agresores.
En los últimos 36 meses, 500 mujeres han sido muertas de forma violenta por los hombres que se siguen creyendo dueñas de ellas.
Somos el sexto país en asesinatos de mujeres por sus parejas.
¿No es una cuota muy alta para conmemorarla hoy sólo con aplausos y flores?
Las loas y homenajes, las palabras de felicitación sean bienvenidas.
Pero el machismo sigue imprimiendo su huella.
El Nacional de hoy domingo lo plante editorialmente y con claridad. Las mujeres quieren más que homenajes

Este libro, el más recientemente editado por el Centro de Estudio de Género de Intec, plantea cuestionamientos a la efectividad de la legislación sobre violencia. Las autoridades y el movimiento de mujeres deben ver sus conclusiones.
Lourdes Contreras, directora del Centro de Estudios de la Mujer de Intec, acaba de reafirmarlo en la puesta en circulación del libro Super Vivencias, una investigación de cuatro casos - tres mujeres agredidas y un agresor- en el cual se demuestra que teóricamente la legislación de violencia está muy bien, pero que en la práctica hay fallos en su aplicación.
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Este 8 de Marzo debe celebrarse….pero las mujeres aspiran a mucho más de lo logrado.
Han avanzado, y en gran medida por su lucha.

El lado bueno: ¿Quien diría que Rosa Elena Moreno hoy una empresaria del mueble, era una empleada de la fábrica de su marido hace seis años, donde era explotada como las demas trabajadoras, además de tener que atender a su dueño y los oficios de la casa? La diferencia la hizo la capacitación. Realizó un curso de seis meses de tapicería y ebanistería en el Centro Evangelina Rodríguez, de Los Mina. Hoy traza su propio camino. Foto: joserafaelsosa.com

Tienen leyes de protección contra la violencia.
Hay senadoras.
Pero ninguna es Presidenta del Senado.
Hay mujeres en las Fuerzas Armadas.
Pero ninguna es Secretaria de Estado de las FF.AA.
Hay mujeres en política.
Pero ninguna ha llegado a ser Presidenta.
Las mujeres son el 51% de la población y parecería un contrasentido que se esté luchando por un 35% de los puestos electivos, cuando debería ser la mitad.
Hay avances.
Pero el asunto no se resume a cuantas mujeres haya en la proporción electoral o en determinados puestos de decisión de políticas. Es más estructural. Hay que meterse más hondo en el cuerpo social.
Pero es mucho más lo pendiente en la agenda.
Hoy el avance en la visión de género ha ganado escaños y posturas en áreas como la justicia y toda la estructura legal que no sólo establece protección sino que estimula a hacer uso de ella y la Policía Nacional, en la cuya base persisten muchos enclaves ideológicos machistas, pese a la asimilación de las mujeres incluso en puestos de mando.

Es un orgullo constatar cómo las oficiales y alistadas de la Policía Nacional (con el respaldo de su Jefatura) mantienen una firme actitud de defensa a la mujer frente a las agresiones de que son víctima, lo cual no impide que una parte considerable de los feminicidas (asesinos de mujeres) sigan siendo alistados y oficiales militares y policiales.

Por acción de la conciencia y no del azar, ha generado un liderazgo firme y operativo que tiene una clara visión de género tanto en la Procuraduría General de República, la Suprema Corte y en Procuradurías Fiscales de las principales ciudades, comenzando con Santo Domingo; la Secretaría de Estado de la Mujer (creada en 1982 por el gobierno de Salvador Jorge Blanco y que, por suerte o decisión firme de los gobiernos, se ha mantenido y ampliado sus acciones y programas), labor a la cual hay que agregar el papel de género en los programas del Despacho de la Primera Dama y roles tan cruciales como el desarrollado por la senadora Cristina Lizardo (en materia de salud preventiva y desarrollo de las mujeres).

La opinión pública no puede estar más sensibilizada sobre el papel de la mujer, sobrepasando los rancios criterios de su alabanza al rol de madre y cuidadora de sus hijos (que nadie debe, en sano juicio negar) pero estableciendo el trascendental potencial y aporte que las mujeres hacen al desarrollo social, a la actividad productiva, a la generación de ideas de reciclaje social, a la creación, al arte, al deporte.

Se agregan a estos hechos, el permanente trabajo de organizaciones no gubernamentales que se han especializado en el desarrollo de proyectos y capacitación (todas con un clara visión de género), entre las cuales, para citar a título de ejemplo, se encuentran

el Patronato de Ayuda a la Mujer Maltratada,
el Centro de Investigación para la Acción Femenina,
el Centro de Solidaridad para el Desarrollo de la Mujer,
Mujeres en Desarrollo (ahora con su 30 aniversario),
Tu Mujer, el Centro de Servicios Legales para la Mujer,
el Colectivo Mujer y Salud
y otras muchas que harían interminable la relación y que no son menos importantes.

El reconocimiento de la mujer hoy día es un hecho social indudable…pero se sigue matando mujeres cada 24 horas, en una espiral de violencia que no se ha detenido nunca y que, incluso, da la impresión de que es mayor el número de casos ahora con todas estas condiciones que antes, cuando en materia de género, no existían estas condiciones.

Los datos oficiales hablan de 500 mujeres asesinadas “por amor” en 36 meses. Una mujer asesinada cuatro días. Un verdadero escándalo epidémico que debía llenar a la sociedad toda de vergüenza, pese a todos los avances.
El concepto de la nueva estrategia, de la cual ya se están colgando vallas públicas, es un acierto indudable. “Yo sólo le pego a la pelota… Jamás a una mujer” campaña lanzada por la Procuraduría Fiscal del Distrito a fin de concientizar a los dominicanos para no ejercer violencia en contra de las mujeres.
La campaña es sumamente novedosa por varios factores: evita el uso de imágenes terroríficas de mujeres agredidas, está dirigida a un público blanco definido y crucial (los hombres, potenciales agresores siempre), basada en una actividad de enorme interés masculino, como el béisbol y con un sentido de coyuntura que revela inteligencia y sentido de oportunidad: el inicio del Clásico Mundial de Béisbol y de la temporada de Grandes Ligas.

Esta estrategia de comunicación fue ideada por las periodistas Onoris Metz, Alba Nelly Familia y Arelis Peña Brito, que la presentaron como trabajo académico en su Maestría en Comunicación en la PCMM. Presentada al Procurador Fiscal del Distrito, encontraron el respaldo para impulsarla. Foto:DR

Este cartel corresponde al tipo de promoción basada en la intimidación a las mujeres ya condicionadas de por si al miedo recpecto de la violencia machista.