Hoy, y siempre, vuela muy alto

Volar alto, fuerte y con claridad de metas es la clave que debe guiar tu vida. Foto de JRS



Hoy, ahora, es el tiempo de detener la ruta de lo acostumbrado.

Hoy, ahora, es la oportunidad para elevar tu mirada.

Hoy, ahora, es el chance que debes darte para elevar tu mirada a lo azul.

Hoy, ahora, es el momento de abandonar las viejas normas del vuelo bajo, insulso,

agresivo, merodeador, impaciente, falto de metas.

Hoy, ahora, es el instante preciso para definir a cual de los grupos de personas que clasificaba Jean Monet : "Las personas que quieren ser alguien" ó "las personas que quieren hacer algo", como citaba anoche Francisco Perujo Serrano, en su confencia La Gestión Cultural en Comunicación (auspiciada por Adompretur, en el Palacio Consistorial).

Hoy, ahora, es el punto de mira para cambiar tu ritmo y hacerte capaz de levantar tu vuelo.

Y mostrar toda tu belleza.

Y premiar al cielo con tu vuelo.

Y engalanar la mirada del mundo tan solo con tu capacidad de volar.

Hoy es el tiempo de multiplicar el bien que eres capaz de entregar.

El vuelo limpio sobre el firmamento nos representa un reto.

Un desafío para avanzar.

Para darnos cuenta del potencial que tenemos.

El poder que tenemos los que cada mañana tenemos la opción de comunicar lo que nos dé el deseo, la necesidad de decir o la imperiosa marcha incesante de los hechos.

Hoy podemos seleccionar los mejores contenidos.

Alejarnos de la chárara.

Perfumarnos de humanidad.

Para darnos cuenta de que cada palabra dicha mejora o hunde al planeta.

Para hacernos conscientes de que cada vez que comunicamos algo, boca a boca, por el blog, por la televisión, en la reunión del barrio, en el pleno de un organismo, estamos empujando la Humanidad a su deterioro definitivo o a ascender a los niveles de excelencia que debía ser el fruto de la convivencia en respeto.

Hoy es el tiempo de tu vuelo.

No mires a otro lado.

Te hablo a ti.

Para que tu capacidad de darte y construir sean la norma.

Hoy es día de buen vuelo.