El placer de disfrutar del rio es un gusto olvidadopor tanta gente en la
ciudad atormentada por las prisas y las presiones.Foto: Jose Rafael Sosa
LOS CACAOS/ San Cristóbal.- Todo parece distinto. Fluidez de los cuerpos en estas aguas, puras y frescas. Hay placeres que debian ser eternos.
Aquí el cuerpo se burla de las leyes de gravedad y se lanza por los aires. El gusto infinito de volar instantáneo. Caricatura de ave, el intento tiene su propia belleza. El tiempo corre aqui con otra medida y el vivir se desarrolla bajo otros signos. Rio y campo hacen la diferencia inolvidable.
Somos tan citadinos que la urbe se ha transformado en el estrecho universo de movilidad, pasiones, encierros, chismes, ilusiones Y a esto, sume desorden, competencia, transito infernal y ahí tiene el paquete completo.
Un día de campo en Los Cacaos, San Cristóbal nos ha ofrecido otras visiones de la existencia.
Una de ellas es la que revalora el placer del baño en el río de aguas dulces. En este caso, el Río Los Cacaos, que hace tiempo el mismo que se desbordo arrasando con vidas y casas cuando el hemos olvidado .
Hasta estos recodos llegamos venimos a conocer de la amenaza que tiene el pais de ver desaparecer los cafetales y, en ellos, el agua, vital para la vida.
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