He aquí una magnífica prueba del amor que decimos tener por los animales. Alguién, a quien me niego a calificar, nos ha proporcionado un reto, al dejar abandonados, en una caja de cartón a  siete perritos hermosos, cuya raza desconozco por falta de conocimientos veterinarios, pero por su configuración, su piel lanuda, su configuración, noto que tienen gran belleza y gracia.  No se están vendiendo. Son gratis, pero hay que entregarlos a quienes se comprometan a: darles un hogar,  alimentarlos adecuadamente, ofrecerles  servicio veterinario (como debe ser) y sobre todo, a amarlos. Ellos parecen dispuestos a amar a quienes los adquieran. Tener un perro es una forma de expresar el amor por la vida, pero implica responsabilidades

Fueron abandonados en la esquina fomada por las calles Santiago Rodríguez y 19 de Marzo (en la subidita hacia la Avenida Mella, desde la calles de Las Mercedes), frente a la casa en que vive Fernando Hermón Gross, locutor, comunicador y gestor cultural..
El los tiene durante unos dias en lo que son adoptados por siete familias a las que interese iniciar una hermosa relación de amor con estos perritos, que se notan activos y deseosos de tener un espacio propio. Para comunicarse con Fernando Hermón pueden hacerlo al celular 809 809 251 17 88. Tambien pueden escribirme al correo: joserafael.sosa@gmail.com

Fernando Hermón se ha comunicado con un servidor para dar a conocer la situación de estos animales graciosos y sanos. Pasé a su casa  y he tomado estas fotos, desde varios ángulos para que sean vistos y adoptados por las familias a las que llegue a su corazón este mensaje.

Esta es una prueba para aplicar todos los discursos que levantamos sobre el amor a la vida, a sus maravillosas expresiones. Estos perritos necesitan de un hogar. No deben seguir en una caja de cartón. Fernando Hermón puede quedarse con uno de ellos, pero necesitamos que algunas familias adopten los otros seis. Son gratis.

 En este instante, se les abrió la reja y todos corrieron para poder caminar con soltura.

 Este es uno de ellos, y en la imagen pueden ver su pelaje, su estado de salud y el hermoso diseño de su piel.

 Aqui se les ve mirando hacia la calle, por medio de las rejas. Esta es la  posibilidad de  darles  un hogar digno y amoroso

La última imagen es la de  uno de ellos, que se subió sobre la reja que da a la calle, para, en una actitud casi humana, observar como pasa frente a él, el mundo real. ¿Quién se anima a adoptarlos? Basta con llamar a Fernando Hermón o escribirme. O pasar directamente, previa coordinación con Nando Hermón, por la casa en que se encuentran.