Maritza Francisco, una extraordinaria mujer que conocí hace muchos años en el Club de Impedidos Físicos (como se les llamaba antes), del Centro de Rehabilitación, donde además, era empleada, me da la muy buena noticia de que participa de un proyecto en la Junta Central Electoral que persigue facilitar y garantizar el voto a las personas que tienen limitaciones visuales o motoras, a la luz de lo cual, por ejemplo, las personas ciegas, tendran a disposiciún una boleta con codigos en braile que les permitiràn sufragar sin la intervención de nadie.
Ella me envia este video promocional del voto, en el cual se nota la inclusión de las personas con discapacidades de diverso tipo y se nota un traductor de señas para que el mensaje llegue a quienes no pueden escuchar.
Agradezco a Maritza Francisco, de quien tenía tanto tiempo que nada sabía. Ahora se encuentra en el justo lugar que debe estar.
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