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| Aun cuando no lo crea, son Hally Berry y Tom Hanks
Si usted es de esas personas que se
satisface con la oferta cinematográfica promedio; con sus 115 minutos como
media temporal sostenida, si va al cine por entretenerse por un buen rato y
salir de la sala igual que como ha entrado para regresar a lo cotidiano, si
pertenece al grupo de personas cuales no les dice nada fuera de lo previsible, esas personas a las cuales el arte es un
elemento de distracción sin tomar en cuenta la trascendencia del arte, de la
literatura bien lograda y el ingenio humano expresado en una tarea de cine
formidable y seductora, entonces, si usted está en esas categorías, no vaya a
ver la sinfonía cinematográfica llamada Cloud Atlas (El Atlas de las nubes). Ni se acerque por las dos salas que la proyectan en Fine Arts, de Novo Centro. La página oficial de la película.
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Si IMDB le da 8.1. de puntuación, algo debe estar
pasando en el gusto del 50 % de los críticos que la han evaluado al tiempo que
la otra mitad no sale de su asombro ante el espectáculo que implica en lo visual, en su textual y en el
dominio de los recursos del cine.
Se trata de la más formidable muestra de
cine épico de ficción, que deja la sensación llana de que se ha ganado vida con
tan solo verla. Sus textos incisivos, tajantes, tiernos
“Ayer, mi vida iba en una dirección, hoy va en otra. temer, creer, amar. Acciones que determinan el rumbo de nuestras vidas. Estas fuerzas comienzan, mucho antes de nuestro nacimiento y sobreviven a nuestra desaparición. nuestras vidas no nos Pertenecen, estamos unidos a otros en el pasado y el presente, y con cada crimen y cada gesto amable, forjamos nuestro futuro”
La crítica internacional ha sufrido su más
serio aparcelamiento a favor o en contra. Nadie permanece igual al verla porque es provocadora, seductora, visualmente
deslumbrante, solazada en sobre todo en el maquillaje, vestuario de época, que
nos permite disfrutar de la versatilidad de actores que tienen en esta ocasión
la oportunidad de actuar en un abanico de personajes disímiles.
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| Hally Berry, Tomm Hanks y Susan Sarandon. |
Armando Almánzar, un referente local la
crítica, le reconoce valor, pero no se excede en elogios.
Esta producción de 100 millones de
dólares que engarza seis historias con los mismos camaleónicos personajes,
encarnados por actores a los que se condujo a interpretaciones salidas de los esquemas
ordinarios por parte de Tom Hanks, Halle Berry, Jim Broadbent, Hugo Weaving, Jim Sturgess, Du-na Bae, Ben Whisaw, James D'Arcy, Xun Zhou, Keith David, David Gyasi, Susan Sarandon, Hugh Grant,Robert Fyfe, Martin Wuttke, Robin Morrissey, Brody Lee, Amanda Walker, Ralph Riach,Andrew Havill,
dirigida por Tom Tykwer, Andy Wachowski, Lana Wachowski (AKA Larry
Wachowski).
No será
suficiente que los hermanos Wachowski, hayan sido los directores de The Matrix,
ni que la cinta demandó una inversión de esfuerzos y creatividad para recrear
seis tiempos de la historia del mundo distintos (incluyendo una visión de la
Super-Corea del Siglo XXII).
Hemos
visto, y vuelto a ver Cloud Atlas y podríamos volver a disfrutar de sus 172 minutos, faltandole tan solo 8 minutos para llegar a las tres horas. La
película que tiene en cartelera Fine Arts, en dos salas, está cautivando la
gente, que llega a descubrirla.
La super-producciónse
basa en una novela de grandes ventas escrita por David Mitchell adaptada por Lana Wachowski.
SINOPSIS
El atlas de las nubes es una novela que da la vuelta
al mundo y recorre desde el siglo XIX hasta un futuro apocalíptico, a través de
seis historias entrelazadas.
El relato se abre en 1850 con el regreso del notario estadounidense Adam Ewing desde las islas Chatham a su California natal. Durante el viaje, Ewing traba amistad con un médico, el doctor Goose, que comienza a tratarle de una extraña enfermedad causada por un parásito cerebral…
Repentinamente, la acción se traslada a 1931 en Bélgica, donde Robert Frobisher, un compositor bisexual que ha sido desheredado, se introduce en el hogar de un artista enfermizo, su seductora esposa y su núbil hija…
De ahí saltamos a la Costa Oeste en la década de los setenta, cuando Luisa Rey destapa una red de avaricia y crimen que pone en peligro su vida…
Y, del mismo modo, con idéntica maestría, viajamos a la ignominiosa Inglaterra de nuestros días, a un superestado coreano del futuro próximo regido por un capitalismo desbocado y, finalmente, a Hawai, a una Edad de Hierro post-apocalíptica que corresponde a los últimos días de la historia.
El relato se abre en 1850 con el regreso del notario estadounidense Adam Ewing desde las islas Chatham a su California natal. Durante el viaje, Ewing traba amistad con un médico, el doctor Goose, que comienza a tratarle de una extraña enfermedad causada por un parásito cerebral…
Repentinamente, la acción se traslada a 1931 en Bélgica, donde Robert Frobisher, un compositor bisexual que ha sido desheredado, se introduce en el hogar de un artista enfermizo, su seductora esposa y su núbil hija…
De ahí saltamos a la Costa Oeste en la década de los setenta, cuando Luisa Rey destapa una red de avaricia y crimen que pone en peligro su vida…
Y, del mismo modo, con idéntica maestría, viajamos a la ignominiosa Inglaterra de nuestros días, a un superestado coreano del futuro próximo regido por un capitalismo desbocado y, finalmente, a Hawai, a una Edad de Hierro post-apocalíptica que corresponde a los últimos días de la historia.
Ficha Técnica
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