Deidamia Galán es una mujer mulata. Una como tantas otras.
Se diferencia, además de la armoniosa belleza que adorna su rostro y su cuerpo, por su actitud tierna, dulce, firme y militante en la vida y el trabajo.
Es una de las colaboradoras de cinedominicano.net, un proyecto de comunicación en la red para apoyar el cine nacional.
Me agrada trabajar con ella. Con todo y sus prisas. Con todo y su falta de tiempo.
El rostro de esta mujer joven inspira confianza, certidumbre en el futuro.
No es lo que están pensando. Para nada.
Es el tipo de mujer que sabe lo que quiere y tiene metas definidas.
La amistad sincera es una de ellas.
Deidamia es una amante total del cine.
Deidamia es una profesadora de la estética.
Nunca tenemos chance de reconocer el valor de la gente que nos rodea.
En esta oportunidad me permito expresar mi criterio sobre esta joven mujer.
Y mi admiración plena.
Y tanto como a ella, a los demás miembros del staff de cine domincano.net: Carlos Manuel Plascencia (el editor, residente en NY), Joan Guerrero, efectivo y creativo en el mundo digital; Alexei Tellerías, infinitamente detallista y crítico y quien tiene la extraña y envidiable virtud de vivir su existencia como lo hace un actor consumado en el interpretación que más le gusta; Rubén, un médico que debió haber sido director de cine y que tiene una de las colecciones de peliculas (cinemateca) en DVD más grandes del país.
En fin, Deidamia es uno de muchos ejemplo de trabajo, armonía y belleza. Una prueba indudable del temple y el valor de la mujer dominicana.
Nunca se lo había dicho.
Ya era hora.
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