Momento de la entrega de la carta a la Secretaría de Estado de la Juventud a José Feliz, encargado de Relaciones Públicas.
Me complace mucho la solidaridad que exhiben los periodistas cuando a uno de ellos les ocurre un caso que demanda solidaridad.
Es un fenomeno interesante que no se registra en otros sectores.
Hay que reconocer la unidad de ese sector profesional cuando hay que actuar en apoyo de uno de sus integrantes.
El caso de Vianco Martínez es buen ejemplo.
Envuelto en un incidente en el cual resultó sacado violentamente del Teatro Nacional, Vianco ha desplegado todos los esfuerzos, dentro de los márgenes legales, para reivindicar ante la justicia y la sociedad lo que le ocurrió.
Ayer, un grupo de sus compañeros, entregó una carta al Secretario de Estado de la Juventud objetando la participación en el Premio Nacional de la Juventud, (certámen oficial del cual soy jurado).
La misiva al licenciado Franklin Rodríguez deja sentado que un reconocimiento al Sr. Díaz, joven empresario artístico, sería un mensaje negativo a la sociedad debido a su supuesta vinculación cn el incidente ocurrido hace 5 meses en el Teatro Nacional, cuando Vianco intentaba entrevistar a Pedro Guerra. Se recuerda que la entrevista no se pudo efectuar y que se ordenó sacarlo de la principal sala de espectáculos en una forma que se consideró abusiva.
Obviamente, en tanto soy jurado del Premio, no es ético que suscriba un evento del cual soy parte deliberante.
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