Felipe Polanco y Maggie de Polanco, al inicio del testimonio de esta
valiente mujer. Hizo llorar a cada alma sensible en el Teatro Nacional.
Foto: jrs
Teatro Nacional. 12 de la noche.
Y mientras nos dirigimos al parqueo para regresar a casa, las palabras se Maggie de Polanco, rubia, serena, hermosa, emocionada hasta las lágrimas, nos siguen retumbando en la mente y el alma.
Esta mujer, rubia, serena, confiada, hermosa, paciente y firme, había subido al escenario del Teatro Nacional a las 10:46 minutos de la noche para confesar el infierno en que se había constituido su vida al compartirla bajo el matrimonio con un artista del humor, respecto del cual el público sólo conocía en el cómodo y agradable papel de hacer reír desde la televisión y los shows de humor.
Esa mujer, ascendió lentamente los cuatro peldaños de la escalera derecha del Teatro Nacional para contar, con voz que se le quebró en más de una oportunidad, cómo Felipe Polanco se levantaba temprano y se iba al colmado a pedir la primera de las diez cervezas que tomaría en las primeras horas del día.
El público acudió fiel a la cita . Y ambos, Boruga y Freddy,
se lucieron. Foto: Arismendy Lora
Maggie de Polanco refirió que sin dinero ni comida en la casa – mientras Boruga brindaba cervezas y ron a sus amigos en el colmado cercano- , con la vergüenza asaltándole su dignidad, fue por primera vez a pedir a crédito algunos alimentos, para recibir esta respuesta de parte del muchacho que atendía el negocio:”Perdone señora pero el Don ha dicho que no le fiemos nada a usted ni a sus hijos”.
Maggie de Polanco, se convertía con esas palabras, sin ser artista, sin aparecer en los anuncios promocionales del espectáculo Dios nos ha hecho reír, en la figura principal del concepto de esta producción.
Sus palabras llegaron hondo. Muy hondo el alma de todo ser vivo allí presente.
El gimiqueo y los sollozos contenidos se sentían a cada tantas butacas. Las lágrimas escapadas con cierta vergüenza, rodaban por los rostros de hombres y mujeres. No era la parte humorística tan popular y tan conocida del Boruga de nuestras risas del pasado.
Felipe Polanco y Freddy hacen un merengue de calle llamando a los
jóvenes a buscar a Jesucristo. Foto: Arismendy Lora
Así era la vida de la familia de Felipe Polanco, el colorista del humor más destacado de la generación de veteranos del humor dominicano, convertido hace nueve años al cristianismo y esforzado en presentar su testimonio para que sirva a quien pueda tomarlo en cuenta. El consumo de alcohol, la presión de su trabajo, el egoísmo, el amor por lo superficial, lo condujeron a una adicción que le mostró los aspectos más grises de su existencia y que le llevó a causar tanto mal a seres que le amaban y que, ahora, le aman mucho más.
El espectáculo de humor al que se nos convocó era poco usual: dos humoristas que se han desarrollado sobre todo en la televisión, eran el atractivo de un programa de onda espiritual y de fe: Dios Nos ha Hecho Reír.
La hija de Boruga lo abraza luego de haber bailado uno de los números
que interpretó su padre. Foto: JRS
No se trataba del previsible desarrollo de rutinas para provocar dos horas de carcajadas desternillantes en base a la gracia, la interpretación y la creatividad de estos dos protagonistas de tantas risas por tantos años, para, al final producir un rato de desconexión al público y unas ganancias para los dos profesionales del humor que perfectamente se habrían merecido.
Dios nos ha hecho reír ofrecía en su promoción mucho más que eso.
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Por una parte, habría de develar desde el escenario más noble de la República Dominicana, la basura de vida que había tenido un alcohólico que estuvo a punto de arruinar su carrera y su familia y por otra parte un Felipe Polanco y un Freddy Beras Goico ofrecieron anoche en el Teatro Eduardo Brito el que sin lugar a dudas ha sido el mejor show de toda su trayectoria, tanto por la versatilidad y química que han logrado por años de labor artística y creativa en común, como por la combinación de sus testimonios de vida.
Beras Goico, por su parte, no fue menos trascendente.
El más completo de los artistas de la televisión dominicana y uno de los que con mayor fuerza ha encarnado el grito de protesta ante las injusticias y abusos, uno de los que más obras de beneficencia ha motorizado desde su Fundación El Gordo de la Semana en coordinación con la Fundación Corazones Unidos, también hizo un extendido y apasionadamente humano relato de su relación con el mortal cáncer de páncreas, del cual Dios le hizo sanar, con un poco de ayuda de la ciencia médica avanza con tarjeta de residencia en Boston.
Freddy Beras es Freddy Beras....simplemente. Foto Arismendy Lora.
Su voz también quebró en llanto cuando contó sobre la llamada que recibió de Juan Luis Guerra indicándole: “Jesús te ha declarado sano”. La piel de centenares de personas se erizó de emoción y los aplausos le interrumpieron. Gente que sabía que no estaba asistiendo a un show para que primaran las carcajadas y el escapismo de la realidad cotidiana.
Un improvisado homenaje se hizo a la decana de las locutoras y actrices dominicanas María Cristina Camilo por parte de Boruga cuando este bajó al público a recoger testimonios. Foto.JRS
Matizado por una notable carga de fe, el espectáculo, humorísticamente hablando, tuvo la versatilidad de las dos estrellas del humor que enfilaron sus chistes a un tono de bíblico y de iglesia. Buena forma de animar al provocar la risa, con el mayor respeto, a partir de situaciones vividas supuestamente por de curas, papas y pastores.
“A mi me han pasado tantas cosas que si no fuera por la protección de ese que está allá arriba yo no estuviera vivo”, expresó Freddy.
Indicó que el punto de encuentro con su Dios fue el cáncer de páncreas que el sobrevino en el año 2006 el cual si no fuera por la presencia de Jesús en modo alguno hubiera podido sobrepasarlo.
Luego de varias lágrimas, risas y emociones, Beras Goico llamó a Felipe Polanco para que juntos hicieran una rutina de cuentos comenzando con los “Viejos”, luego los chistes “Cristianos” y finalizando con par de canciones. Freddy cantó “Gracias Jesús”, y Boruga “No has terminado conmigo” de René González.
Un merengue de calle transformó a los humoristas en mamberos del momento quienes dejaron el saco y corbata para darle paso al bling bling y gorra calada, elementos distintivos en la vestimenta del género.
La historia de por qué Jesús no nació en República Dominicana fue de lo más entretenido y que mayores carcajadas provocó en el público por el paralelismo de nuestra realidad cotidiana con la vivida durante el nacimiento de Cristo.
El público correspondió al llamado y llenó la Sala Principal del Teatro. Algunos asientos vacíos porque las puertas fueron cerradas a la hora exacta. Se puede observar a Arismendy Lora, el fotógrafo, mientras trabaja.Es el cazador cazado. Foto: jrs
Notable la interpretación de Moro con Chivo (parodia del merengue Solo contigo) que popularizara Milly Quezada.
Cuando suben a escena dos artistas del humor como estos hombres el resultado es previsible. Foto: Arismendy Lora.
Pero donde la botaron por los 411 del Quisqueya fue con el número final, dedicado a Radhamés Segura, Nuria Piera, los apagones y el cuento sobre la versión que indica que Jesús nacería en República Dominicana.
Si vuelven a presentar ese espectáculo, y desea reir y llorar, casi al mismo tiempo, no se lo pierda.
Ficha Técnica:
Dirección Musical:
Maestro Pedro Pagán
Orquesta:
Helton de Jesús- Batería,
Darling de los Santos – Piano,
José Augusto Feria (Tuto) –Teclados,
Carlos Suero –Guitarra eléctrica,
Ernesto Núñez – Trompeta 1,
Joel Meléndez – Trompeta 2,
Joel Rosario – Saxofón
Libreto:
Felipe Polanco y Freddy Beras Goico
Testimonios
Felipe Polanco
Freddy Beras
Maggie de Polanco
Cuerpo de Baile:
“Pies de Ciervas”
Amy Zamora,
Sarah Feria Polanco,
Katie Polanco,
Jamie Pumarol,
Carla Peña,
Leonela Raynoso,
Cinthia Ureña
Raysa Caamaño.
Sonido:
Romeo Enrique Acosta
Coros:
Josefina Polanco
Nurys Quezada
Noelia Acosta
Karen Estévez
Fotógrafo oficial del espectáculo:
Arismendy Lora.
Producción y actuación principal:
Felipe Polanco y Freddy Beras Goico
A Beneficio de: Fundación
El Gordo de la Semana y
Hogar de Niños Adonay, de Bayaguana)
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