Fotos: joserafaelsosa.comUna premiación artística sin conflictos es como un helado amargo.
Un proyecto de reconocimiento del mejor de los mejores entre los artistas, sin enfrentamientos se asemeja a una noche de viernes con el olor laboral de lunes por la mañana.
Es como un niño ocupado únicamente en coleccionar sollozos.
Y de las confrontaciones de posturas, la gente aprende a valorar.
El público se hace más critico y más consciente.
Esta mañana el Senado de la República reconoció la trayectoria de 25 años de Acroarte premiando el arte dominicano.
El más importante galardón artístico dominicano arriba a su primer cuarto de siglo, con las previsibles situaciones de competencia,conflictos y enfrentamientos de puntos de vista, lo que es inherente a toda premiación y, sobre todo, cuando se persigue reconocer una dimensión tan subjetiva, compleja y volatil como es la del Arte.
Acroarte no debe temer a la polémica ni a definir premios, porque todo veredicto será siempre contradictorio.
Esas polémicas constituyen parte de lo que es la premiación.
No existe una sola premiación artística en el mundo en la cual no se verifiquen expresiones de competencia, acciones de sabotaje mediático, enfrentamiento de los egos y los intereses, campanas bien y mal dirigidas.
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Tengo una fe enorme en la seriedad del Premio Casandra, en la forma en que se conduce, en los procedimientos establecidos y en el éxito de este ceremonial venidero que consagra el galardón como el mas permanente, firme y constante con que cuenta la clase artística dominicana.Observo a los francotiradores que incluso han intentado crear un premio paralelo, en un intento que nunca ha fructicado y que produce ahora toda clase de especulaciones e "informaciones petardo" para tratar de poner piedras al camino.El Premio Casandra. por encima de lo que han querido sus detractores, los amantes de la división - que no lograron dividir nada- va a permanecer.Su ceremonia, por lo que conozco, sera impecable y dejará sentado un hito de producción.
La selección de los y las galardonadas, espero que sea la más justa.Y pienso que la responsabilidad de los cronistas es elegir ellos, no delegar ese derecho al anonimato que supone una votaciòn popular por teléfono,Los y las cronistas están para eso. Aun cuando su decisión se preste a polémicas y contradicciones.
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