Cinco verdades cruciales sobre la comida dominicana y caribeña

La edición, a cargo del  Editorial Aguilar de La Nueva Cocina Dominicana, de Rosa María Gómez, La Chefa, tiene una trascendencia que excede los linderos infinitamente creativos de las cocinas para plantear un tema crucial de identidad nacional dominicana y del Caribe.

Ese libro, ejemplo de un sensible sentido editorial tanto en la limpieza de sus textos como en el criterio gráfico que documenta sus platos, expresa el punto de reflexión más reciente sobre el vinculo de la gastronomía, la cultura, el ser nacional y el turismo.
Esta publicación cuidada  provoca una serie de reflexiones que compartimos ahora con nuestros públicos.

I-Ser lo que se come. 
A ojos de simplicidad, la comida marca tres momentos en la agenda diaria: desayuno, almuerzo y cena y la historia terminaría. Pero no es tan sencillo.
La comida  es mucho más que  comida. Su condición de ración alimenticia es solo una parte  dietética-operativa  de su intrínseca su  misión, pero  ese aspecto  es sólo de sus esencias.

dietética-operativa  de su intrínseca su  misión, pero  ese aspecto  es sólo de sus esencias.

Lo gastronómico   es tan mágico, que ha otorgado a sus talentos creadores la auténtica posibilidad de crear un olor, un sabor y un color que nadie ha generado antes y  con esa talentosa corriente de creación, mediante el plato dispuesto en la mesa, generar vivencias que marcan no solo el paladar sino la memoria emotiva, puede que nos encontremos ante una impronta vivencial que  en ocasiones supera en mucho la onírica imagen de la palmera y el mar turquesa, el sol buscado por quienes tienen tiempos fríos y nevados en la tercera parte del tiempo anual, la exuberancia de unos jardines espectaculares, la aventura creada de un recorrido marino, aéreo o terrestre, el quehacer de animación que incluye desde los ejercicios en piscina hasta la dulce y rítmica atmosfera de la ansiada discoteca.

La comida de una localidad determinada,  en tanto es única, es legado exclusivo, desconocido para el visitante y a quien deja en capacidad de volver al destino, sobre todo por el atractivo de la memoria gastronómica archivada.

La comida local, manejada con criterio gourmet, adornada como demandan las ofertas del turismo, se transforma en parte de la experiencia.

Para nacionales, la comida dominicana en otros países se transforma en un factor de identidad, tal como ocurre con los comedores y restaurantes  dominicanos en  las diversas latitudes del mundo:

Mofongo de El Colmado.

·      En Madrid: (El colmado, lastimeramente desaparecido por la falta de conciencia popular y oficial sobre la importancia de su existencia)
·        El Mofongo en Los Cuatro Caminos , de Madrid
·        El Café Restaurant Dominican, en Atlanta
·        El Mangú, el restaurante que en su reducido espacio, cerca de la sede de Naciones Unidas en NY.
·         El Pez Dorado en Lawrence. Massachusetts.
·        ….Tan solo para citar algunos conocidos.




II- Ratificación de la identidad nacional:

El encuentro con la comida dominicana en puntos distantes del Altar de la Patria se resuelve en un encuentro con el alma nacional, con nuestra forma de ser, con nuestra creatividad parida a golpe de sazones y combinaciones, de tratamientos sobre los insumos agrícolas propios del terruño nacional.

El encuentro con la comida dominicana en puntos distantes del Altar de la Patria se resuelve en un encuentro con el alma nacional, con nuestra forma de ser, con nuestra creatividad parida a golpe de sazones y combinaciones, de tratamientos sobre los insumos agrícolas propios del terruño nacional..

La gastronomía como producto cultural se expresa de dos formas: en los platos y los libros de cocina, muchas veces injustamente considerados como “literatura accesoria menor”, en gran medida responsabilidad de quienes los editan tan solo como compendio de recetas y sin adjuntar estudios o perspectivas que vinculen  los platos al resto del mundo, generalmente con un enorme descuido en la gerencia de los aspectos gráficos o fotográficos, sacando de ellos únicamente el provecho operativo de la recomendación para llevar a la mesa platos tradicionales, evitando la experimentación o el cruce cultural de la cocina dominicana con otras mesas de la región o el mundo.

III. Libros dominicanos de Cocina. Ventas y trayectoria  

Los libros de cocina junto a los que tratan sobre  Trujillo, (a favor o en contra)  son los de mayor venta ante el público dominicano, de acuerdo a como lo establece la Asociación Dominicana de Libreros y la Cámara del Libro. Adicionalmente los reportes de venta No hay otros libros que tengan tanta salida asegurada como los de estos dos temas.

El primer libro dominicano de cocina, reportado por Jimmy Hungría en su libro “Gastronomía musical y bibliografías en construcción” (Editorial Letra Gráfica 2012), es Cocina criolla, de la profesor puertoplateña Amanda Ma. Ornes Vda. Perelló, editado en 1955.
No existe un listado cronológicamente organizado de los libros dominicanos de cocina, pero hay referencias aquí y allá sobre sus principales títulos.
Pero una relación, que finalmente siempre será parcial, puede ser esta:




1-    COCINARTE (Xilia Hernández), y lleva el mismo nombre de un programa de televisión que ella tenía en el Canal 2 “Teleantillas”.y que tuvo dos tomos y es una relación  bien presentada de platos cotidianos. 

2-    MUJER 2000 (Silvia de Pou)  son libros que forman parte integral de la familia dominicana desde hace muchísimos años. Son libros excelentes que van desde la receta más simple hasta la más gourmet. Tres ediciones y probablemente el de más incidencia social hasta el momento para personas que desean dominar lo básico y lo gourmet de la cocina dominicana. (Citada por Marisol Portillo).


3-EL LIBRO ROJO DE EUGENIA Su Cocina (Eugenia Rojo) No es el único de su autoría, aun que si es el más importante sobre todo por su  tiene un capítulo de comida dominicana y una selección, sencillamente perfecta de comida navideña. Eugenia Rojo tiene una obra gastronómica que pese a su despliegue mediático, no ha sido todavía valorado en su justa medida. (Citada por Marisol Portillo).
4. COCINAR ES FACIL  (Claudia López, Editorial Letra Gráfica) Según refiere  Portillo es un libro tan “fácil” como su nombre. Es una selección de las recetas dominicanas más conocidas, explicadas de una manera fácil y sencilla. (Marisol Portillo) , a lo que agregamos que Claudia  López es una cheff dominicana de carrera profesional desarrollada en exclusivas cadenas de hoteles de Estados Unidos, pero que se mantiene apegada a la misión de divulgar los platos de la mesa cotidiana, por lo cual en todas sus vacaciones viene a Santo Domingo a investigar. Orlando Inoa se dio cuenta de la importancia que tenía el rescate de esos platos y se ofreció para editarlo. Tiene tres ediciones.
5-OCINAR ES FACIL  (Claudia López, Editorial Letra Gráfica) Según refiere  Portillo es un libro tan “fácil” como su nombre. Es una selección de las recetas dominicanas más conocidas, explicadas de una manera fácil y sencilla. (Marisol Portillo) , a lo que agregamos que Claudia  López es una cheff dominicana de carrera profesional desarrollada en exclusivas cadenas de hoteles de Estados Unidos, pero que se mantiene apegada a la misión de divulgar los platos de la mesa cotidiana, por lo cual en todas sus vacaciones viene a Santo Domingo a investigar. Orlando Inoa se dio cuenta de la importancia que tenía el rescate de esos platos y se ofreció para editarlo. Tiene tres ediciones.
7-EL SECRETO MAGICO DE LA COMIDA CRIOLLA (Delcy Mata , Editorial Alas 2010)  libro de recetas  clasificadas por  tipo de comida  y que incluye desde el Yaniqueque hasta las habichuelas con dulce, pasando por la forma en que se hace un arroz blanco.Su ventaja es la sencillez de sus propuestas pero le falta ese aliento de alta edición de otros. No es una edición buena (Editado por J. R. Sosa).
8. Gastronomía dominicana. Historia del sabor criollo”. (Marcio Veloz Maggiolo y Hugo Tolentino Dipp, Editado por CODETEL, 2005), que aborda el tema más desde lo histórico en general y antropológico en particular, estableciendo una relación de los alimentos que se cultivaban en las tierras encontradas y los que trajeron los españoles y describen el cruce gastronómico que se verificaba en la región. Ambos autores, que probablemente nunca hayan cocinado nada, permiten ver el panorama histórico de la zona. Un dato que ofrecen es que el arroz, ingrediente principal del lócrio, se cultivaba en La Española intensamente ya en el siglo XVI, desde donde se conducía  a otras partes próximas en el Caribe. Esta linea editorial, que produjo excelentes entregas, ha sido suspendida por la nueva administración bajo Claro.
IV. Cocina y perfil dominicano  en el marco del Caribe
A fuerza de comer como ritual obligatorio y cotidiano, se suele perder para quienes tenemos la gastronomía como  instrumento de supervivencia por lo que resulta valiosa la nueva perspectiva que reconoce su importancia como parte del ser nacional, del perfil identificatorio dominicano y que le relaciona con los otros quehaceres nacionales del  Caribe.

Los esfuerzos que ha hecho Casa del Caribe para estudiar y vincular la comida criolla con las otras comidas de la zona caribeña con ingentes y se relatan como parte de la introducción de Mario Núñez, nacido en Chile y ya completamente aplatanado por las experiencias vitales: matrimonio y quehacer gastronómico y cultural, lo han tornado una voz y una presencia local de una fuerza orientadora de su pluma que se expresa además cada semana en su orientación  crítica de cine que desarrolla por medio de Diario Libre.

Domplines de yautía coco.  Pag. 98 La nueva Cocina Dominicana

V. Un libro que  abre  perspectivas
La nueva cocina dominicana, de Rosa María Gómez, a partir de insumos locales,  reinventa un perfil nacional exhibible  en cualquier lugar gourmet del mundo.
No es el primero que versa sobre la relación de la cocina dominicana y su relación histórica con la región del Caribe.

Para llegar a la publicación de Aguilar, hubo de pasar un largo proceso iniciado en 2009, con la edición de la página


que sirvió para fomentar el intercambio con personas y países en torno al eje de la comida como expresión nacional, para posteriormente fundar el restaurante Casa Caribe, primer centro gastronómico de la región del Caribe, que crea a su vez un laboratorio culinario, abriéndolo a un grupo de profesionales con lo que se formaliza un diálogo permanente sobre la cocina del país y del Caribe.

La publicación del libro La mejor cocina dominicana reinventa el valor de la gastronomía de valor local frente al turista que viene el destino desde tantos países.

Pollo deshuesado guisado al vino,
(La Nueva Cocina Dominicana)

La obra de Rosa María Gómez, fruto de  un proceso cuidadoso de elaboración y con un cuidado extremo en su edición, plantea los dones de la comida en función de lo más agradable del perfil nacional llevado a la mesa con la clara voluntad de crear una experiencia de vida.

Rosa María Gómez es una profesional de altísima calificación, que tiene entre sus entrenamientos y desarrollos gastronómicos, Diplomada en Gestión y Arte Culinario, Universidad Dominico Americana, Santo Domingo, República Dominicana.Especializada en Cocina Internacional, Escuela Superior de Hostelería Mariano Moreno. Especializada en Repostería y Pastelería, Escuela Superior Mausi Sebess, Buenos Aires, Argentina y pionera y promotora de  Nueva Cocina Dominicana y de la Alta Cocina del Caribe.
·         Es Chef fundadora del Centro Cultural Gastronómico Casa Caribe. Actualmente participa en el Comité de A&B de la Asociación de Hoteles de Santo Domingo.

La  publicación de Editorial Aguilar deja ver la importancia que se transmitió en la edición al dar una dignidad singular a la presentación de los ingredientes y los platos.

Sabe la autora  del libro que en muchas oportunidades, el mejor recuerdo de un país visitado es un olor, un sabor y un color. Para decirlo en tan solo una palabra: la comida.

Se trata de una de las publicación impresa que con mayor cuidado se ha manejado respecto de sus contenidos textuales y gráficos. Se siente que además del conocimiento del tema y el diseño, la pasión por la cocina, deja su impronta por medio del amor de sus cultivantes.

Sabe contar la historia de un proceso largo que no se limita a la presentación de un recetario. Vincula las iniciativas para ver en la cocina mucho más que el aspecto alimentario y lo eleva a la condición de variante cultural y parte fundamental del ser dominicano, lo describe con una prosa limpia y acertada y suma a ello el esfuerzo de un estilismo fotográfico como pocas veces se ha logrado. 

Referencias web sobre cocina dominicana:

http://elnacional.com.do/comida-dominicana-atrae-turistas-a-rd/ Atlanta. Operado  por una familia dominicana.







http://www.cocinadominicana.com/  Página de cocina  de Tía clara





http://es.scribd.com/doc/77591857/476-Gastronomia-Dominicana PDF Libro Gastronomía dominicana. Historia del sabor criollo”. (Marcio Veloz Maggiolo y Hugo Tolentino Dipp, Editado por CODETEL, 2005

Post a Comment

0 Comments